El Refugio
El Refugio

Hola chavales! ¿Qué hay? Soy Orexxio, y aquí os traigo la quinta entrega de la novela de Dave. Nomás que decir, espero que os agrade y comenten! Gracias por leer!

El Strip de Vegas. El famosísimo Strip. Lugar donde estoy, 2000 chapas en mi inventario. Todo un mundo por recorrer, casinos llenos de luces, fuentes con alborotadoras bailando, robots policía haciendo su función. Un casino llamado Lucky 38 cerrado y custodiado por 4 robots. Decidí explorar toda la franja, mirar el famoso Vault 21 hotel, entrar en el Tops, el mejor casino para apostar… Caminé, solo, era un sueño o la realidad? Es la realidad señores, la realidad. Recorrí casi toda la franja del Strip, entré en el Tops. Me recibió un guardia, me dijo:

-Por favor, me puedes dar todas tus armas?

-Sí, claro, pero donde las guardan?

-Tranquilo, estarán tan guardados como gatitos.

-Ok, ten cuidado, esa arma perteneció a generaciones.

-Vale, quieres saber algo más sobre el Tops?

-Sí, dónde están las ruletas, y como se puede apostar?

-Pues verás, tienes que comprar fichas que se cambian por chapas, recto a la izquierda hay dos encargados de darte fichas del Tops para que puedas apostar. Las ruletas están en el área recreativa, donde están las tragaperras, blackjack y demás juegos.

-Vale, gracias.

Mientras me acercaba escuchaba gritos acusativos, ya sabéis, lo típico, ¡hijo de puta! Y cosas por el estilo.

Cuando me iba acercando estaba viendo a mi amigo de la entrada y a un hombre con una camisa a cuadros, y dos guardias con unos subfusiles.

Me acerqué disimuladamente, y pude escuchar.

-¡PERO TÚ DE QUÉ VAS! ¡MATANDO POR UNA PUTA FICHA O QUÉ?

-Perdona cielo, pero creo que esa ficha valía más de lo que tú puedes imaginarte, hablaremos en mi suite, solo espera.

-No, dime todo, o te juro que te vuelo la cabeza, igual que a todas tus guarraespaldas cabrón.

-Yo que tú me tranqulizaría muñeca, no te conviene usar la fuerza. O me esperas, o tendré que matarte.

-Vale, te espero, y como se te ocurra traicionarme, te buscaré por todo el puto Mojave hasta torturarte.

-Que sí, tú espera y punto.

Mi amigo y el hombre de cuadros se fueron tal por su camino, el ‘mensajero’ se iba a los hoteles, y yo le dije que se esperase un momento, gritando.

-¿Qué haces aquí?

-Nada, vine a apostar y punto, pero te vi y se me ocurrió ayudarte.

-¿No ves que no puedes ayudar? Esto no te incumbe, no metas los hocicos donde no te llamen.

-Que te den.

-Que te den a ti, joder.

-¡CHAIRMAN! VENID A POR ESTE CHUPAPOLLAS!

Y entonces se fue corriendo, dejándome con los guardias, estaba confuso, el que aparentaba ser aliado ahora no lo era. Se acercó al ascensor y subió a hurtadillas.

No tenía tiempo a pensar, lo único que me quedaba era pedir explicaciones, que las hice. Me quedé en la pasarela, el hombre con la camisa de cuadros, estaba yéndose muy nerviosamente, y se fue del Tops.

Pues nada, me fui al ascensor, esperando al ‘amigo’ en cuestión y bajó. Me dijo.

-Lo siento por hablarte así, lo siento, necesitaba que los Chairman se distrayeran para que yo pudiera ir al ascensor y mangar todo lo posible.

-Pues mira, no sé si matarte, que no puedo porque no tengo armas, o seguir siendo tu amigo, que por cierto, me debes dinero.

-Ok lo siento, no me mates, cometerías un error, te sirvo de mucho y cuando lo sepas te lo diré todo. Pero antes debes acompañarme a por Benny, ha escapado con la ficha de Platino, y debo ir a por ella, te vienes conmigo?

-¿Qué? Es decir, mis padres me han dicho que nunca confíe en los extraños.

-Mira, yo le he confiado mis sesos a un doctor de Goodsprings, y estoy vivo, mira por donde. Aunque la gente del Yermo sea muy cabrona, delante tienes a un chico noble que sólo hace su trabajo.

-Bfff… Me has convencido, ok, iré contigo, pero solo porque me caíste bien.

-¡GENIAL! ¿Qué armas tienes?

-Pues… ahora mismo tengo una pistola de 9MM, tenía un rifle de Servicio pero lo cambié por un pase al Strip.

-Vale, eres tonto, vamos a recuperar tu rifle. ¿Dónde lo vendiste? ¿A los paranoicos de Mick & Ralph? También me intentaron colar su tarjetita del Strip, que además de falsa, los robots te pueden pillar.

-Pues sí.

-Bien, vayamos a la puerta de Freeside, salgamos de aquí!

Cuando salimos del Tops, un hombre se acercó al Mensajero y le dijo que no se qué de la Legión de César, y de la Marca de César.

Era confuso, creo que dijo que se uniera a La Legión y que así podía recuperar su ficha de Platino, además de matar a Benny, pues él se fue a Cottonwod Cove a activar la ficha de Platino. El hombre se fue, y mi amigo me dijo que nos fuéramos ya, que si había que dormir o algo que lo hiciera ahora. Elegí dormir, compré una habitación de dos camas en el Tops, y el Mensajero y yo descansamos. Menudo día me espera…