“Es la patrona de los niños perdidos. Muy popular entre los fieles de Rivet City. Me extraña que nunca hayas oído hablar de ella. Si quieres oír su historia, el domingo será el tema de mi sermón. La misa empieza a las 8 de la mañana. Deberías venir.”— Padre Clifford
La iglesia de Santa Mónica es una iglesia Cristiana en Rivet City, es dirigida por el Padre Clifford y su acólito Diego. La iglesia es Católica y una de las pocas iglesias Cristianas que se encuentran en el yermo, esto se debe a que la mayoría de los cristianos abandonaron su fe después de la guerra.
Trasfondo[]
El Padre Clifford cuenta la historia de Santa Mónica de la siguiente manera:
“Hoy escucharemos la historia de Santa Mónica. Nació en Gran Lanta, a orillas del océano. Sus padres eran necrófagos. Sí, has oído bien: necrófagos. El simple hecho de que fuera concebida fue un milagro. Pero que naciera normal fue un milagro aún mayor. Dios puso a prueba a Santa Mónica. No tuvo una vida fácil. Los saqueadores la vendieron como esclava y se vio obligada a vender su cuerpo. Le quitaron a su único hijo, Ehren, y lo vendieron. Rezó todas las noches por su seguridad. En cambio, no rezaba por sí misma, aunque su carga era grande. Todas las noches predicaba la palabra de Dios a los negreros. Tras dieciséis años, Dios ha hecho un milagro. Uno de los negreros se arrepintió de sus crueles maneras y la ayudó a escapar. Estuvo cuatro años buscando a Ehren. Cuatro años vagando por el Yermo. Dios estuvo pendiente de ella durante esos años. Cuando encontró a su hijo, descubrió que era un hombre malvado. Ehren había destronado a sus maestros y había ocupado su lugar. Se convirtió en un hombre todopoderoso. Ehren convirtió a su madre en su esclava a pesar de que sabía quién era, ya que la culpaba de la vida tan desgraciada que había tenido. Todos los días Ehren la sometía a alguna prueba retorcida. Simplemente le sonrió y le dijo: "Te perdono". Todas las mañanas aparecía milagrosamente curada como si nada hubiera pasado. Cuando Ehren se dio por fin cuenta del infinito amor de Santa Mónica y de Dios, se arrojó a los pies de la santa y le suplicó perdón. Ehren liberó a todos sus esclavos para alegría de estos. Se arrepintió de todas sus maldades.”
Disposición[]
La iglesia de Santa Mónica cuenta con varios bancos y un púlpito donde el Padre Clifford predica sus sermones. También hay una habitación cerrada donde vive el Padre Clifford.
Misiones relacionadas[]
- El replicante
- Donativos de la Iglesia
- El día perfecto para la boda perfecta
Notas[]
- El Padre Clifford le dirá al Trotamundos Solitario que Santa Mónica es la patrona de los niños perdidos, siendo un aspecto muy importante de la teología de Clifford.
- Si el Trotamundos Solitario es atrapado tratando de hurtar de la caja de donaciones del Padre Clifford, Diego se volverá hostil hacia él/ella.
- Si el Trotamundos Solitario le dice al Padre Clifford que Diego ha estado durmiendo con Angela Staley y luego escucha su conversación, Clifford le dirá a Diego que su alma se pudra en el purgatorio, un lugar en el que las almas de los muertos se purifica antes de ir al cielo, es un concepto religioso con especial presencia en la teología católica y la copta.
- Esta es una de las dos localizaciones donde podrás donar chapas para ganar buen Karma de manera rápida. El Padre Clifford sólo acepta donaciones en tandas de 100 chapas (por 100 de Karma).
- Si bien hay una caja para las donaciones, el Padre Clifford guarda las donaciones en su inventario, y por consiguiente puedes robárselas con la consiguiente pérdida de Karma.
- Los personajes no jugador tiene una secuencia de comandos (script) para ir a la iglesia todos los domingos por la mañana para escuchas el sermón del Padre Clifford.
- Angela y Diego contraer matrimonio si el Trotamundos Solitario convence a Diego de hacerlo.
Apariciones[]
La iglesia de Santa Mónica sólo aparece en Fallout 3.
Tras bambalinas[]
La historia de Santa Mónica es una versión deformada, pero que conserva algo de la historia de la Santa Mónica de la vida real, quien, notablemente, también pasó una buena parte de su vida orando por su hijo, que llevaba una vida descarriada. Eventualmente sus oraciones fueron escuchadas, ya que su hijo hoy es recordado como San Agustín.
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